Se acerca fin de año y los dueños de boliches de la ciudad analizan la posibilidad de organizar eventos con poca concurrencia de personas.
Rodrigo Catini en Posturas explicó que primero se había pensado en una estrategia que consistía en la organización de un evento en un lugar amplio para que puedan concurrir muchos jóvenes. Esto también facilitaba los controles de fiscalización ya que sería todo en un mismo espacio.
Luego de la disposición de provincia que establece que la capacidad máxima es 200 personas cambió los planes. Dijo que hoy se analiza la alternativa de una apertura “estilo bar o cervecería”, donde se pueda asistir a comer y escuchar música.
Por último destacó que se estudiaran los costos de organización dado que no habrá más de 200 entradas para vender.